El Teatro-Museo Dalí de Figueras rescata las fantasías animadas de Dalí y Disney en la gestación de la película «Destino», de 1946.
Érase una vez el primer año después de la terrible guerra incivil. Tiempos convulsos. Años cuarenta. Salvador Dalí traslada su surrealismo onírico y mágico, desde el Ampurdán, a Estados Unidos. Y allí fusiona su ingente talento al de Walt Disney, que le encarga que convierta en puro arte los dibujos de Disney para un proyecto maravilloso: "Destino".
Dalí con Gala y los Disney en Portlligat
La colaboración entre Dalí y Disney se formaliza en un contrato de trabajo que se firma el 14 de enero de 1946 y tiene una duración de 2 meses. En este período de tiempo, Dalí trabaja de manera formal en los Disney Studios de la localidad de Burbank, California, creando los dibujos para "Destino". En la idea también intervienen dos colaboradores de Disney, John Hench y Bob Cormack, con los que Dalí idea y trabaja las imágenes que deberán ilustrar la historia de amor que transcurre en la película.
La fuente de inspiración para el proyecto de Dalí y Disney es la canción mexicana "Destino", de Armando Domínguez, cuya letra da cuerpo al argumento de la película y cuya música acompaña las imágenes en todo momento. A través del dibujo animado, Destino quiere explicar y remarcar la importancia del tiempo mientras esperamos a que el destino actúe en nuestras vidas. La historia de amor entre una bailarina y el jugador de béisbol/dios Cronos es el hilo conductor a través del cual se nos muestran las múltiples peripecias que sucederán antes de que el destino haga su aparición.
Paisaje ampurdanés
En "Destino", Dalí recurre una vez más a la iconografía más propia y personal, y hace uso del paisaje ampurdanés y del recurso de las dobles imágenes para transportarlos y trabajarlos en el lenguaje nuevo de los dibujos animados. La combinación de las dobles imágenes con las transformaciones de objetos y las constantes referencias a obras ilustran un mundo de sueños en el que se mezclan los dibujos llenos de personalidad de Disney y el imaginario surrealista daliniano. Dalí explicaría que con "Destino" trata de reflejar una «mágica exposición de los problemas de la vida en el laberinto del tiempo», y describe, muy explícitamente, alguna secuencia: « [...] la sombra de la campana se confunde con la silueta de la joven y ambas se ponen a bailar. La cabeza de Cronos esculpida sobre la pirámide se libera de la piedra y comienza también a bailar, intentando ahuyentar una lluvia de monstruos que caen del cielo. Cronos aparta a los monstruos de su cuerpo, y cada vez que se quita uno de encima se le hace un agujero».
De hecho, si consideramos que una de las constantes dalinianas es el acercamiento de la idea artística elitista a la cultura de masas, o viceversa, la colaboración que Dalí establece con Disney hace que dos lenguajes con grandes inquietudes se encuentren. "Destino" se convierte así en un producto artístico único donde la expresividad daliniana se alía con la fantasía y la sonoridad de Disney, una película en la que las imágenes de Dalí adquieren movimiento y las figuras de Disney se "dalinizan".
La película original, de una duración de entre seis y ocho minutos, tenía que formar parte de un "package film", entendido este como un largometraje en el que se combinan diferentes episodios o relatos cortos. Pero "Destin"o no se completó en 1946, sino que solo se rodó una secuencia experimental de quince segundos; se deduce que el conflicto de la Segunda Guerra Mundial y la falta de presupuesto del momento impidieron que el proyecto saliera adelante. Finalmente, y gracias a los esfuerzos de diferentes instituciones encabezadas por Disney, en el 2003 se decide retomar el proyecto y se procede a recuperar las primeras ideas y los bocetos sobre los que se basaba el film. Destino acaba siendo una realidad para ser contemplada y disfrutada por un amplio público, tal y como fue en un principio.
Aunque Disney posee la mayoría de los dibujos, e incluso 5 pinturas, que Dalí y sus colaboradores de la factoría Disney realizaron para Destino, la Fundació Gala-Salvador Dalí conserva diversos bocetos y croquis para las imágenes de la película que el artista guardó para él. Se trata principalmente de estudios preparatorios hechos a lápiz y tinta sobre papel vegetal, muy poco conocidos, procedentes de los cuadernos en que Dalí dibujaba y volvía a dibujar las imágenes que tenía en la cabeza, en un proceso creativo concentrado y apasionado que refleja su entusiasmo por el proyecto.
La exposición
El cortometraje, que fue nominado a los Óscar, es el resultado, pues, de la conexión artística entre los Estudios Disney y Salvador Dalí. Puesto que no se preveía que el proyecto fuera un éxito, la factoría tuvo que renunciar a su realización hasta que un sobrino del fundador, Roy Disney, lo recuperó hace siete años y, como un reto personal, creó el corto a partir del material que se conservaba en los estudios Disney y la Fundación Dalí.
La exposición Dalí + Disney = Destino podrá verse desde hoy y hasta el domingo 8 de mayo de 2011 en la Sala de los dibujos del Teatro Museo Dalí de Figueras. En la muestra se proyecta permanentemente el cortometraje, y se exponen 27 piezas: 1 óleo, 1 acuarela, 15 dibujos preparatorios, –10 de ellos inéditos–, y 9 fotografías de Dalí en el proceso creativo de este material, del matrimonio Disney en Portlligat en 1957, y de los Dalí en Burbank (California). También se ha editado un folleto divulgativo dirigido a todos los públicos sobre los contenidos de la exposición.
La presentación de este magnífico proyecto fue realizada por Joan Manuel Sevillano, gerente de la Fundación Dalí; Montse Aguer, directora del Centro de Estudios Dalinianos, y David A. Bossert, director creativo y jefe de proyectos especiales de Walt Disney Animation Studios.
Por otra parte, "Fantasía" es un largometraje de animación de vanguardia totalmente en línea con el surrealismo onírico y mágico de Dalí, coincidiendo con la época del pintor ampurdanés en los Estados Unidos. Fantasía muestra un Walt Disney atrevido e innovador en el período de entreguerras, y evoca la infancia en Marceline, el pueblo natal de Disney, símbolo de una América idílica y añorada. Blu-ray es el nuevo formato de disco grabado con rayo láser azul, y permite una muy alta definición.
Fuente: ABC
martes, 9 de noviembre de 2010
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1 comentarios:
fue una suerte que dali y walt disney se conocieran y decidieran trabajar juntos, pero es una pena que su proyecto no llegara a terminarse, estan bien que años después lo terminasen pero habria estado mejor que eso mismo lo hubieran hecho en los años 70 o 80 cuando dali todavia vivia y habria podido supervisar la película
me encabta tu blog, lo tienes muy currado, sigue asi
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